viernes, 12 de octubre de 2012

Capítulo 42 (vuelve un viejo amigo)


Fuera en el pasillo ,Lidia se separó del agarre de Tasia.
-puedo yo sola, no soy una invalida
-solo quiero ayudarte-le dijo Tasia sin molestarse por su actitud-¿qué es lo que ha pasado?
-no lo se-contestó la bruja apoyada en la barandilla mirando hacía el cielo-no quería herirlo, al menos no conscientemente
-tú nunca pierdes el control, ¿cómo ha ocurrido?-intervino David
Lidia sonrió irónicamente
- tengo pleno conocimiento de mi poder y de lo que puedo hacer, lo controlo, pero es este sitio- se dio la vuelta para mirarlos-la energía que corre por aquí es tan negra que me hace sacar lo peor de mi
-no lo entiendo-dijo Tasia
-no lo entiendes porque tú creas tu poderes,-le explicó David-es una de las razones por la que el poder de los elementos es tan poderoso,pero en el caso de las brujas, extraen la energía de la tierra, aunque el poder de Lidia sea la magia negra y solo use la energía negativa, necesita de la energía positiva a su alrededor
Tasia frunció el ceño algo confundida,al verla Lidia añadió:
- es algo así como el contrapeso, ya sabes, ying yang, luz oscuridad,día noche, para que haya una debe de existir la otra, cuando yo extraígo la magia negra de la tierra ,la magia blanca queda alrededor, sin usar ,pero está ahí, en este sitio hay mucha energía negativa, tanta que me...me..-se paró buscando una palabra que sirviera-me colapso-exclamó chasqueando los dedos
-algo así cómo una sobredosis de energía ¿no?-dijo Tasia
David rió.
-sí,algo así
-vale, pero... aquí hay más brujas de la luz que de la oscuridad ¿por qué hay más energía negativa?-preguntó curiosa, ahora que lo entendía quería saber más
-esa es una buena pregunta-comentó Lidia- una para la que no tengo respuesta

Quedaron en silencio ante ese dilema, ninguno sabía el porqué.
-¿crees que te expulsaran después de lo ocurrido?-le preguntó Tasia a Lidia
-lo más seguro, yo no tengo un respaldo económico que me libre de estos problemas
-quizás mi abuela pueda
-dudo que tenga tanta influencia, de todas maneras solo nos queda esperar.

Un rato más tarde los tres estaban sentados en el suelo con la espalda apoyada en la pared, hablaban poco porque los tres estaban preocupados de lo que pudiera suceder. Tasia estaba apoyada en el hombro de David, y cada vez que tamborileaba los dedos o empezaba a mover el pie, presa del nerviosismo, él le apretaba la mano para que se tranquilizara. Tasia se sorprendía de como en tan poco tiempo, David se había metido bajo su piel.
Las puertas se abrieron y todos los aspirantes a Guardianes salieron, no hubo ninguno que no los mirara al pasar. Ellos siguieron allí sentados, viendo la gente pasar sin importarle lo que pudieran pensar o decir. Fue Zule la que se acuclilló y abrazó a Tasia delante de todos. Lidia jamás se habría esperado eso, la sorpresa fue evidente en su cara. Cuando Zule no se separó Lidia, ésta le devolvió el abrazo, algo torpe y rígido ,pero lo hizo.

-gracias por salvarme, ojala sea como tu de mayor- le susurró al oído antes de irse corriendo detrás de unos chicos de su edad. La gente se estaba dividiendo en grupos por edades, cada uno en una dirección diferente.
Tasia y David miraron a Lidia. Por una vez no mostraba esa capa de hostilidad. Se había emocionado. Emocionado de verdad.
Una hora después los tres estaban casi dormidos en el pasillo, unos apoyados encima de los otros con los párpados caídos, así los encontró Elisa.

-no estás expulsada-anunció antes de que a ellos les diera tiempo hablar
-¿de verdad?-preguntó Lidia sorprendida
-sí, aunque tendrás que probarles que puedes controlar tus poderes
-¿cómo?
-verás- comenzó a informarlos- hay una prueba para entrar en la arena en la que los alumnos más avanzados en las clasificaciones deberán demostrar que saben hacer y de que son capaces, bueno, tú harás esa prueba mañana
Lidia asintió.
-no es problema- le comentó, segura de si misma
-pero hay un problema-añadió Elisa ,frunciendo los labios-un extra, te jugaran una mala pasada para poner a prueba tus habilidades
-¿y si no la supera?-preguntó David, aunque se imaginaba la respuesta. Él había estado bastante más tiempo junto al consejo, viviendo bajo sus normas y sabía como pensaban.
-será expulsada-hubo un silencio tenso ante la evidencia que todos sabían, no sería fácil para Lidia pasar esta prueba- te conozco Lidia,-le dijo Elisa acariciándole la mejilla-puedes pasar está prueba, hoy pasaremos el día practicando
-gracias, pero...-nunca había entrenado con nadie, no desde la muerte de su madre, de eso hacía ya mucho.
-no soy bruja pero soy vieja y he visto mucho, podré ayudarte-dio por concluida la discusión- vosotros dos deberíais ir al clase, los entrenamientos para la arena ya han comenzado, vais a tener que esforzaros mucho
-¿dónde tenemos que ir?-preguntó Tasia
-Tasia, tú a la parte trasera del edificio, te toca atletismo-sonrió- con eso no tendrás problemas¿no?
-sabes que no-le respondió su nieta algo más relajada
-David a ti te toca estrategia, en el piso de arriba, no se que aula deberás preguntar
Él movió la cabeza afirmativamente y cada uno de ellos fue en una dirección, comenzaba el trabajo.

***


-me muero-se quejó Tasia, tirándose de espaldas en la cama- no siento ninguna parte del cuerpo
-normal-dijo Carmen riendo-¿siempre eres tan competitiva? Todo el mundo estaba pendiente de quien ganaba en las carreras, lleváis un día aquí y ha sido más emocionante de cuantos he pasado
Tasia esbozó una ligera sonrisa.
-gracias, me alegra servirte de entretenimiento, pero no suelo ser tan competitiva
-entonces lo de hoy ¿por qué?-fue hacía uno de los armarios y buscó dentro mientras Tasia hablaba
-estaba enfadada por lo que sucedió en el comedor y corriendo me despejo, llevaba mucho tiempo sin hacerlo pero cuando esa chica rubia
-Tiffany-añadió Carmen
-sí, esa, la oí decir algo que no me gusto, me enfade y bueno, nos picamos un poquito
-¿ese algo tiene que ver con las chicas que servimos para pagarnos la estancia?-Tasia no contestó-me lo imaginaba-dejó lo que estaba haciendo y fue a sentarse delante de Tasia- a mi no me ofenden esos comentarios, te agradezco a ti y a Lidia lo de hoy en el comedor, no te haces una idea de cuento, pero los que actúan así, como Tiffany, muchas veces no tienen la culpa de ser como son
-¿a qué te refieres?-preguntó irguiéndose para apoyarse sobre los codos, hizo una mueca al sentir las agujetas en el costado.
-han sido criados así, tienen todo cuanto quieren y nunca les ha faltado de nada, sus padres los han mimado en exceso¿ acaso querrías tú abrir los ojos y ver las cosas malas del mundo?
-eso no les da derecho a comportarse como lo hacen
-cierto, pero solo son una minoría, a mi al principio también me pasaba como a ti, pero luego vi que no valía la pena, me siento orgullosa de haber luchado por lo que quiero y haberlo conseguido
-¿ pero tú qué edad tienes? Hasta donde yo creía eras más pequeña que yo, y sin embargo eres mucho más madura
Carmen soltó una carcajada alegre levantándose de la cama.

-está anocheciendo voy a ir a buscar a las gemelas, no tardaré
Tasia soltó una especie de gemido gruñido ,indicando que la había oído. Se dejó caer de nuevo en la cama, cuando tuviera suficientes fuerzas se levantaría a ducharse, después de un duro día como ese le hacía bastante falta.
Cerró los ojos un momento sin darse cuenta y se quedó dormida. Estaba relajada, sin ninguna pesadilla, hasta que sintió el frío colarse en sus huesos, la soledad inundarle el corazón y el miedo filtrase en su mente hasta llegar a la desesperación.
Su sueño hasta ahora tranquilo cambió radicalmente. Ante ella apareció una sombra,pero no atacaba. Estaba quieta, observándola. Como siempre ,parecía una silueta de humo pero que a pesar de ser casi intangible ,presentaba cada uno de sus rasgos con perfección. La sombra extendió la mano hacía ella y filos hilos de humos empezaron a moverse  rápidamente hasta dejar ver un mano de carne y hueso. De la mano siguió al brazo, a la misma vez que los pies comenzaban la misma acción. Cada uno de esos hilos fue moviéndose hasta desaparecer, hasta que puedo ver el rostro que ocultaba debajo. El rostro de una persona que conocía muy bien, de pelo corto rubio, ojos claros y labios finos.

-Sergio