martes, 22 de mayo de 2012

Fuego Capítulo 33( la calahonda)



Tasia llevaba sin montar en la moto de David desde que la invitó a comer en esa pizzería hacía ya varios meses, parecía que había pasado todo un mundo desde entonces, y prácticamente así había sido, dudaba seriamente de que jamás llegara a experimentar tantas cosas en tan corto periodo de tiempo. Se agarró más fuertemente a la cintura de David cuando este aceleró, cerró los ojos y disfrutó de la sensación del aire golpeándole en la cara .Tenía que pedirle a David dar más paseos como estos.
Una vez en su  casa David se quedó esperándola en el portal mientras ella subía hablar con su madre.

-¿cómo qué te vas toda la semana con tu abuela?, últimamente no pasas por casa tan solo para dormir- fue lo primero que dijo su madre cuando le explicó que se volvía a ir
-mama, la abuela siempre viaja mucho y aunque lleva aquí unos meses no sabemos cuando se volverá a ir, quiero pasar todo el tiempo que pueda con ella- le dijo como excusa
- no hace falta que estés todo el día fuera, ella puede quedarse aquí como siempre ha echo
-la abuela  dice que aquí somos muchos y que no quiere molestar
-pamplinas-replicó Ana
-eso mismo le dije yo, pero no me hace caso ya sabes lo cabezota que es , venga mama déjame ir,  solo estaré fuera diez días mientras mis compañeros están de viaje
Su madre suspiró algo contrictá y Tasia supo que iba ceder.
-de acuerdo, pero  me llamarás todos los días,
-me pasaré de vez en cuando por casa no te preocupes
-eres mi hija me preocupo hasta cuando sales a comprar el pan- le respondió su madre sonriendo- pero aunque pases no se si estaré , comencé ayer a trabajar de nuevo
-¿ en serio?
- sí, una antiguo amigo me llamó para que volviera al hospital como enfermera, ahora que ya sois grandes tengo más tiempo para mi¿ te molesta?
-no digas tonterías, me alegro de que vuelvas a trabajar en lo que te gusta, y seguro que Érica también- se puso de puntillas y le dio un beso en la mejilla- voy a por mis cosas
-hablando de tu hermana ¿donde está? Me preocupa más ella con sus locas ideas que tú
-iba a venir conmigo pero se entretuvo, ella también quiere quedarse con la abuela
- ah no, eso si que no, a ti te lo permito porque no tienes clase  pero ella si, además sus notas han bajado considerablemente
 “eso es decir poco” pensó Tasia contando que le habían quedado cuatro
-eso ya se lo dices tú, no creo que tarde en llegar – le gritó Tasia desde el pasillo mientras iba hacía su cuarto

Metió en una mochila lo más necesario, su ropa, sus pertenecías personales como el cepillo de dientes, dejó un hueco para su Ipod y metiendo por último unos zapatillas de deporte salió de la habitación. Se despidió de su madre con dos besos y un fuerte abrazo y prometió llamar por la noche para hablar con su padre. Con la mochila colgada de un hombro bajó las escaleras para reunirse con David que la esperaba.

-¿y dónde vamos?- le preguntó Tasia mientras se ponía el casco
-¿te gusta la playa?
No le dio tiempo a contestar porque él arrancó. Los dos se fueron . No se dieron cuanta de que la madre de Tasia los miraba por la ventana sin saber si sentirse divertida o preocupada. Se apartó de la ventana para coger el teléfono y llamar a Elisa, tenía que asegurarse de que estaría con su abuela y no con un chico los diez días enteros. Confiaba en su hija pero eso no quitaba que se preocupase, además, cuando eres adolescente sueles hacer muchas locuras por amor, bien lo sabía ella.

Tasia sabía que llevaban mucho rato en la carretera pero no estaba cansada, ni mucho menos, pero si no llegaban pronto acabaría dormida apoyada en la espalda de David, y eso que el no iba lo que se dice lento, pero estaba tan agustito que no podía evitar que se le cerraran los párpados.

-¿falta mucho?
-no, quince minutos o así ¿ estas cansada?
-no, pero creo que ya se donde me llevas
-¿donde?
Tasia no podía verle la cara pero sabía que estaba sonriendo.
-a la calahonda, la playa
-muy lista, pequeña- le dijo el con satisfacción

Como David había predicho no tardaron ni quince minutos en llegar. Tasia conocía la playa de haber estado de pequeña con sus padres ,pero de eso ya hacía muchos años, antes iban todos los domingos pero poco a poco fueron perdiendo la costumbre ,o por el trabajo o por la simple pereza, para cuando nació Laura ya no iban nunca, pero aún así no había cambiado ni un ápice.

Aparcaron la moto al pie de la playa y David colocó los dos cascos sobre ellas.

-¿los vas a dejar ahí?- preguntó ella refiriéndose a los cascos y la moto
-si ¿ por qué?- David le cogió de la mano y tiró de ella para que comenzara a andar
- para empezar ahí no se puede aparcar y si dejas los cascos cualquiera se los puede llevar
-no te preocupes- le respondió sonriendo- Lidia uso un truquillo, ningún humano la puede ver
-¿ y los seres mágicos?
- ellos sí, pero las brujas y magos son los que más abundan en la tierra y ellos no se acercan a la playa, el agua salada altera sus poderes
-¿ de verdad? Apenas se nada sobre la magia de las brujas, Lidia se niega a contarme algo- dijo enfurruñada él le beso la frente para que dejara de arrugarla molesta – espera, ¿por qué te ayudó? Me cae muy bien, no me malinterpretes pero Lidia no hace las cosas por caridad
-fue.. um... ejem intercambio- le contestó sin mirarla y sonrojándose levemente
Tasia lo miro suspicazmente entrecerrando los ojos
-¿ qué clase de intercambio?
-no tiene importancia- le contestó él evasivamente
Tasia se paró en seco y cruzó los brazos sobre el pecho.
-si no tuviera importancia no estarías evitando la cuestión
David suspiró y se sentó en la arena. Ella hizo lo mismo.
- ¿ has tenido algo con Lidia?- le preguntó ella con el corazón en la mano,sentía una torbellino en el estomago
-dios no,- rió con ganas y al ver que Tasia suspiraba la abrazó – no me digas que pensabas eso, Lidia y yo nos llevábamos bien y en cierta manera somos iguales pero nunca tuvimos nada
-¿no me estas mintiendo?- le preguntó insegura
- no tonta, además aunque  así fuera tú eres la única a la que quiero ahora
Ella se relajó  a su lado. Se había llevado un buen susto y no entendía porque, Lidia y David eran compañeros, al igual que ella ahora, pero se veía incapaz de competir con la guardiana, ella era tan guapa, tan segura de si misma que era difícil no sentirse insignificante a su lado, pensar en ellos juntos era una imagen que no le gustaba para nada.

- lo mismo me pasa a mi, solo te quiero a ti- le contestó ella y David la beso- pero aún no me has dicho que intercambiasteis
-es una tontería, veras para hacer conjuros se necesitan ciertas cosas, no se cuales son pero siempre son indispensables,
-pero cuando curó a Cintia no usó nada
-sí la usó lo que pasa es que los elementos que lleva necesita los lleva siempre consigo, ¿ nunca te has fijado en el camafeo transparente que lleva del cuello? - Tasia negó con la cabeza- bueno pues dentro del camafeo mezclo todos los elementos necesarios más un poco de su sangre para que se conservara, para los hechizos que tienes que usar mucha magia no sirve pero eso solo sucede en muy raras ocasiones, por lo demás sí,¿ por dónde iba?
- los elementos para el camafeo- le recordó Tasia
-ah, sí, el caso es que para poder teletransportarse a cualquier hora del día, necesitaba algo muy escaso y difícil de conseguir, ya que es antinatura que una bruja de la oscuridad use su magia de día, al menos en el nivel avanzado pero Lidia descubrió que una bruja de por aquí lo tenía
-¿ pero para qué te necesitaba a a ti?- preguntó Tasia sin entender la relación entre los poderes de Lidia y David
- yo tenía que seducir a la otra bruja y cuando no se lo esperase neutralizar sus poderes, entonces Lidia le quitaría lo que necesitaba
-¿y aceptaste solo para conseguir que hiciera la moto invisible cuando quisieses ?- exclamó ella sin dar crédito a lo que decía
-no, yo accedí porque ya le debía un favor y como todo salió bien y sin dificultades ella me hizo eso en la moto como regalo, supongo que estaba demasiado contenta por tener al fin su camafeo para hacer un regalo- contestó encogiéndose de hombros
“ y cualquiera se resistía a un David seductor” pensó Tasia
-pero la bruja no se cabreo, quiero decir, si eso se lo hicieran a Lidia pondría el grito en el cielo
-cierto- admitió él- pero la bruja era de bajo nivel y no pudo hacer nada, Lidia no entendía como tenía algo tan valioso en lo referente a la magia de las magos una bruja con tan poco poder
Aliviada de que solo hubiera sucedido eso se levantó y se quitó las zapatillas. Sonriendole a David comenzó a dar pasos hacía atrás alejándose de él.

- vamos a ver si me pillas, angelito
- con que angelito, en – replicó él levantándose y yendo tras ella.
Tasia corrió hasta a la orilla mientras le provocaba y David no tardo en alcanzarla. La cogió por la cintura, pero con el forcejeo de Tasia y las risas de él acabaron cayéndose sobre la arena húmeda.
- vaya que descuido- dijo él fingiendo inocencia y rodando con ella sobre la arena llenándose de barro
- David para, me estas llenando
-¿ a si? No me había dado cuenta- pero paró quedando él encima con los codos apoyados en el suelo y las manos bajo la espalda de Tasia para que no se clavara las pequeñas piedras y las conchas.- no me sentía tan bien desde hacía mucho tiempo- le confesó
Tasia le sonrió acariciándole la mejilla.
- ni yo, no deseo estar en otro sitio que no sea aquí contigo
Los ojos de David brillaron como fuego verde antes de besarla. Los últimos rayos de la tarde calentaban la arena, la piel de ambos tocándose, Tasia acercándolo más, hasta quedar completamente pegados pero no era suficiente, quería más de él. Sus labios se besaban  sin control, las manos no podían detenerse en un sitió acariciando todo lo que podían. David dejó su boca y le besó los párpados, las mejillas, la mandíbula, el cuello. Tasia sintió fuego en las venas apretó las manos en los bíceps de David y le mordió en el hombro, no muy fuerte pero lo suficiente para que él lo sintiera y soltara un gruñido. Una ola del mar
llegó hasta ellos empapandolos, haciendo que recuperaran el control y recordaran que estaban en una playa pública donde cualquiera podía pasar.

-no se que haces conmigo- dijo Tasia- pierdo el control y me olvido de todo
-tú tienes el mismo efecto sobre mi, no puedo evitar tenerte cera y no besarte- la beso despacio en los labios- no tocarte- y le acarició el cuello con los nudillos- no estrecharte junto a mi para que te quedes conmigo siempre- y la abrazó más fuerte
Otra ola los volvió a bañar, y aunque con desgana ,ambos se levantaron. El sol se veía en el horizonte anunciando la llegada de la noche y con esa imagen los dos decidieron volver.

6 comentarios:

  1. Ains!! Que bonito lo de la playa =D Es muy romanticon jaja Me gusta la pareja que hacen
    Un besito guapa =)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. me alegra que te guste ^^
      y gracias por dejar tu comentario xD

      Eliminar
  2. IAKNWODHOWHOPWQJKMAJÑJMELJLFELFJEHHNKFHNEOJFLEFLEFNE *___________*
    NOEMII! AUQNEU NO ES LA PAREJA LIDIA Y DAVID... ME GUSTA AUN TAVID *_________________________* (Tasia y david)
    Lo de la playa es tipico, la chica corre por la playaaa, el chico la persigue, la atraapaa jajaja pero aun asi me encanta esa parte *_______________________*
    ¡ALAAAA! IBAN A FUCKEAR AHI!! AJAJJAJAJA Que guarrillos!! jajajaja
    PD: Tienes un error mira (bueno si no una letra que se te colo xD)
    Confiaba en si hija pero... ¿No seria su hija? jajaja arreglalo :) )
    Bueno capitulo fantasticooo *_________* Me gusto la explicacion lo de la magia xD ¡Deseo otro capitulo mi señora! jajaaja ¡Besicos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. siempre me sacas una sonrisa con tus comentarios.. si es que te adoro !!!
      me alegra que te haya gustado... y gracias por avisarme del error ;) no me habia dado cuenta
      besos !!!

      Eliminar
  3. Increible, eres increible! Me encanta el momento playa, ¿cuántas hemos soñado con un momento así? jajajajaja, yo creo que todas.. muy bueno, de verdad. Te sigo ¿vale?. Un besito, crack!

    http://onedaytwopeople.blogspot.com/

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. gracias :)
      en los libros todo es muy bonito jajaja
      me paso por tu blog
      besos....

      Eliminar